Se prevee que durante las próximas décadas gran parte del crecimiento de la población ocurrirá en las ciudades. Por este motivo, la instalación de huertos urbanos podría generar un proceso de cultivo 100 veces más eficiente en cuanto al uso de la tierra. La agricultura urbana también utiliza mucho menos agua y produce mucho menos dióxido de carbono.
Los huertos urbanos están de moda y no es pura casualidad. Permiten ahorar dinero, mejora notablemente la salud por la calidad de los alimentos producidos, y es un buen hobby que ayuda a desconectar del estrés del día a día. Podemos invertir el tiempo libre en esta actividad y tener nuestra propia provisión de tomates, pimientos, hierbas aromáticas u otras variedades de frutas y hortalizas. Y como sabemos exactamrente qué químicos utilizamos para hacerlas crecer, nos aseguramos que conservan toda la frescura y que no tiene nada de conservantes ni otros productos agresivos para la salud.
Una idea: Si tenés un rincón disponible en tu casa, podés tener un pequeño huerto urbano. Y si no tenés espacio, podés hablar con un vecino o conocido y empezar un huerto urbano compartido, como propone la web española huertoscompartidos.com, un lugar de encuentro para quienes quieran cultivar un huerto y propietarios de terrenos.